Las cuatro claves para elegir el motor de tu coche y acertar
Cuando buscamos coche nuevo, son muchos los aspectos que hay tener en cuenta. El tipo de modelo que necesitamos y para qué vamos a usarlo, por supuesto el precio, el consumo, el coste del seguro… también es interesante echar un vistazo a las opciones de financiación y a las ofertas de los fabricantes y concesionarios. Pero uno de los primeros aspectos que hay que determinar es el tipo motor.
El motor de un coche es la pieza clave de todo el engranaje que se mueve gracias a él. Además, en la actualidad se ha dejado atrás la dualidad gasolina-diésel para abrir paso a todo un abanico de opciones, desde los combustibles fósiles, el gas licuado, a los híbridos y los eléctricos. ¿Cuáles son las claves para elegir bien la motorización que nos interesa y no equivocarnos?
1. La potencia: hay que tener muy en cuenta el tipo de coche que queremos o necesitamos y, por ende, su tamaño y peso. En relación a esto deberemos elegir un motor u otro. Por ejemplo, para un pequeño urbano de cuatro plazas sobrarán 70 u 80 caballos de potencia, mientras que un SUV o monovolumen requerirán entre 110 y 120.
2. El tipo de trayectos: si vamos a utilizar nuestro coche en traslados mayoritariamente urbanos, quizás sea mejor optar por un gasolina con pocos caballos o por un eléctrico modesto. Para desplazamientos por carretera, son mejores en rendimiento los diésel, aunque los híbridos no enchufables también darán la talla.
3. Cantidad de uso: el número de kilómetros que nuestro vehículo contabilice al año también es un aspecto a tener en cuenta. Para un kilometraje bajo en ciudad mejor optar por los híbridos o los eléctricos. Si vas a recorrer menos de 20.000 kilómetros al año, la opción idónea será un gasolina de baja cilindrada o incluso GLP, ya que el gasto es hasta un 40% menor. Eso sí, si tus distancias van a estar más allá de los 20.000 kilómetros al año, lo mejor para ti es un diésel.
4. Por presupuesto: hay motores espectaculares que no están al alcance de cualquier bolsillo. Antes de comprar, asegúrate de que puedes hacer frente al gasto que supondrá pagar el coche con la motorización que hayas elegido y recuerda que hay modelos con más ayudas a la financiación que otros. Además, controla el gasto total anual que te supondrá repostar tu coche dependiendo del combustible que elijas o de si dispones de un punto de recarga eléctrico cerca de tu casa o puedes instalarlo en el garaje.