Renault Morphoz: Mr. Fantástico con acento francés
En la saga de los 4 Fantásticos de Marvel, ficción nacida del cómic que también encontró su hueco en el cine, Reed Richards es Mr. Fantástico, personaje que además de tener el superpoder de estirar su cuerpo hasta límites insospechados, destaca por una inteligencia descomunal… ambas características son señas de identidad, precisamente, del último prototipo de Renault, el Morphoz, que se vale de la inteligencia artificial y una particular capacidad de “estiramiento” para presentarse en el catálogo de futuro de la marca francesa.
La evolución del automóvil navega de manera imparable hacia la electrificación, la digitalización y la conectividad, y el planteamiento que hace Renault de los automóviles que poblarán las ciudades más allá de 2025 ya lo llevan en su ADN, pero no será, por supuesto, lo único.
El Morphoz cuenta con una plataforma modular eléctrica (de nombre CMF-EV) creada por y para esta forma de energía, beneficiándose de soluciones impensables en los actuales coches de gasolina e híbridos, como un aprovechamiento del espacio más racional y la utilización de unos motores más pequeños y baterías más finas alojadas bajo el piso. También hace posible que su “cuerpo” se estire, dando lugar así a dos versiones, una más urbana, denominada City (de 4,4 metros), y otra más “viajera” y larga (de 4,8 metros), de nombre Travel, que además cuenta con mayor autonomía de uso.
En ambos casos el resto de cotas se mantienen inalterables, con 2 metros de ancho y 1,55 de altura, pero mientras la variante City se adapta mejor a la ciudad gracias a sus dimensiones más contenidas y a una autonomía de 400 km (merced a unas baterías de 40 kWh de potencia), la versión Travel se puede estirar automáticamente, convirtiéndose en un coche más cómodo y aerodinámico, ideal para viajar. Para completar esta “transformación”, el Morphoz se ha de situar en una estación de carga específica, donde además de alimentar su energía por inducción (como los móviles), se montan unas baterías supletorias para obtener 50 kWh adicionales y, por tanto, llegar a los 700 km de autonomía.
¿Y cómo se viaja en el Morphoz? Pues, si nos encomendamos su modo de conducción autónoma de nivel 3 (de los 5 existentes), en aquellas autopistas autorizadas y preparadas podremos soltar las manos del volante y ver cómo el coche mantiene la trayectoria hasta en las curvas, con la distancia adecuada respecto al coche que le precede y gestionando los atascos mientras el conductor puede consultar el correo electrónico o elegir su música favorita. Todo hasta que el sistema requiera la actuación humana.
Por dentro, el Morphoz se encomienda a la digitalización, con una pantalla Livingscreen de 80 centímetros en la zona del salpicadero (que se puede ocultar) y otra de 10,2 pulgadas situada en el mismo volante, además de las auxiliares que recogen lo que “ven” las cámaras que hacen las veces de retrovisores. También está preparado para la gestión por voz y por gestos.