¿La gasolina caduca?
¿Es posible que la gasolina tenga fecha de caducidad? Puede que esta sea una pregunta que nunca te hayas hecho si utilizas el vehículo de forma regular. No obstante, después de un tiempo sin uso o sin llenar el depósito, ¿el combustible que teníamos en el depósito puede afectar al estado o al funcionamiento del coche?
En primer lugar, hay que distinguir entre la caducidad y el periodo de utilización recomendado por los fabricantes. El combustible no caduca como tal, pero si puede llegar a sufrir una oxidación con el paso del tiempo si no se retira o se cambia.
¿Qué significa esto? Al estar durante largos periodos expuesta al oxígeno, a las altas temperaturas o a la luz solar, la gasolina pierde las propiedades y se produce una oxidación que genera compuestos indisolubles que se van acumulando en el depósito.
La gasolina, un producto derivado del petroleo, se volatiliza o se evapora a temperatura ambiente. «Esto, con el paso del tiempo, acaba provocando que se quede en el depósito un producto o residuo pastoso y pegajoso», indican desde el concesionario de coches de segunda mano, Yamovil. Esta sustancia es bastante difícil de eliminar y si se introduce en el circuito del combustible puede que de lugar a una avería en la bomba de gasolina, en el sistema de inyección o en el mismo depósito.
Las fórmulas que se utilizan en la actualidad para generar la gasolina permiten que se mantenga en buen estado durante, al menos, un periodo de doce meses. Sin embargo, es recomendable no conservar el combustible en el depósito durante más de tres meses. Por esta razón los expertos aconsejan desechar la gasolina si el vehículo va a permanecer parado por un largo periodo o dejar el depósito en reserva.