Cinco millones de kilómetros de ida y vuelta son la prueba del futuro de los coches de hidrógeno
Que durante los últimos años la evolución del sector de la automoción ha pasado por el desarrollo de nuevas opciones de energía con las que impulsar nuestros vehículos no es un secreto. El cambio climático y la contaminación hacen presión para que nuestra movilidad sea cada día más limpia y reducida en emisiones.
Los coches con pila de hidrógeno son una de las aspas de la hélice de la nueva movilidad limpia. Y parece que, poco a poco, van resolviendo los problemas a los que se podían enfrentar en un primer momento, como el precio elevado debido a las complicaciones del hidrógeno o la dificultad de encontrar puntos de recarga.
Además, conforme avanza el tiempo demuestran ser coches fuertes y fiables, como el caso de uno de los modelos más representativos de esta nueva tecnología, el Toyota Mirai. En su colaboración con la empresa alemana de transporte CleverShuttle, que dispone de una flota de 45 unidades de Mirai, han anunciado que estos ya han conseguido recorrer cinco millones de kilómetros en total. Las emisiones de esta larga distancia recorrida no han sido nada más y nada menos que vapor de agua.
Además, según han anunciado desde la compañía alemana y desde Toyota, ninguno de los vehículos implicados ha sufrido daños mecánicos, por lo que demuestran la “madurez” de los coches y de sus baterías y su capacidad de funcionar en el día a día sin causar quebraderos de cabeza a los dueños particulares.