En los últimos años la irrupción de términos, conceptos y palabras varias relacionadas con la energía eléctrica se han ido adueñando del mundo de la movilidad. Bajo el paraguas sostenible del futuro que todos queremos, la electrificación se ha convertido en el pan nuestro de cada día para los fabricantes de coches y de motocicletas, que han visto como nuevos actores entraban en el entorno urbano y les disputaban la hegemonía en las calles. Ahora importan los coches eléctricos (más o menos bonitos), el transporte de última milla, los carriles bicis, lo que llaman urbanismo táctico, las fábricas de baterías y los puntos de recarga. Todo un ecosistema nuevo que está creciendo a pasos agigantados y que a partir de este domingo trataremos mensualmente y de forma gratuita desde El Periódico y Neomotor.
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