El póker tecnológico de Hyundai en su gama SUV
Además de las mecánicas tradicionales tanto gasolina como diésel, Hyundai cuenta en su amplia oferta de vehículos SUV con cuatro de las más innovadoras y limpias tecnologías.
Conscientes de que el segmento de los SUV es altamente competitivo, Hyundai Motor dispone de varios modelos con el objeto de responder a cualquier tipo de demanda. Así, además del pionero Santa Fe, cuenta con el i20 Active, Tucson, Kona y Nexo, los cuales se pueden combinar con hasta 16 motorizaciones diferentes, dos tipos de tracción y cajas de cambio manuales o automáticas.
En el caso que nos ocupa, nos fijamos en las nuevas tecnologías implementadas en la gama SUV, y en ella encontramos la híbrida, la híbrida con sistema de 48V, la eléctrica y la basada en pila de combustible de hidrógeno. Las repasamos a través de sus modelos.
Como marca pionera en coches de producción con esta tecnología –lanzó el Tucson Fuel Cell ya en 2013–, en 2018 la marca coreana empezó a comercializar el Hyundai Nexo, el primer automóvil de pila de combustible matriculado en España.
El Nexo es el primer SUV diseñado exclusivamente para consumir hidrógeno y ofrece la mejor autonomía tanto de los vehículos con pila de combustible como del segmento eléctrico: 666 kilómetros (según el ciclo de homologación WLTP), con un tiempo de llenado del depósito de solo 5 minutos.
Su propulsor de pila de combustible consigue una potencia máxima de 120 kW (equivalente a 163 CV), con lo que el Nexo puede pasar de 0 a 100 km/h en 9,2 segundos y alcanzar una velocidad máxima de casi 180 km/h. Por su tubo de escape solo sale agua, por lo que filtra y purifica el aire por el que circula y además entra en el catálogo de coches con etiqueta “Cero” de la DGT.
La variante completamente eléctrica del Kona se desdobla en dos versiones, la más potente con motor de 150 kW y batería de 64 kWh. Esta proporciona una autonomía de 449 km, pero además impresiona por su capacidad de aceleración, ya que solo tarda 7,6 segundos en alcanzar los 100 km/h desde parado. La otra variante cuenta con un motor de 100 kW y una batería de 39,2 kWh, la cual permite al Kona recorrer 289 km con una sola recarga.
La batería de litio puede recuperar el 80% de energía en 54 minutos en un punto de carga rápida de 100 kW, pero en caso de recurrir a un punto de corriente normal (con el cargador de a bordo de 7,2 kW), las cifras son de 9 horas y 40 minutos para la versión con la batería más potente y de 6 horas y 10 minutos para la estándar.
En cuanto al Kona híbrido, el sistema de propulsión combina un motor 1.6 GDI de cuatro cilindros de gasolina y 105 CV con uno eléctrico que desarrolla 43,5 CV (32 kW), dejando ambos una potencia total de 104 kW (141 CV). La batería que alimenta el motor eléctrico es de polímero de ión litio con 1,56 kWh de capacidad.
La más reciente generación del Tucson ha sido la primera en disponer de mecánicas híbridas con sistema de 48V. La batería de iones de litio de 48V y 0,44 kWh, ubicada detrás, bajo el maletero del coche, es la encargada de suministrar energía eléctrica a la unidad MHSG (Mild Hybrid Starter Generator) montada en el motor de combustión. El sistema se carga mediante el frenado regenerativo y puede aportar hasta 12 CV y 55 Nm de par, lo que hace que el arranque sea más cómodo y la aceleración más contundente. Además de esto, la tecnología híbrida de 48V reduce el consumo de combustible y las emisiones de CO2 (hasta un 7%), con el valor añadido de estar entre los coches con etiqueta “Eco” de la DGT.
El sistema híbrido se combina con tres motores diésel existentes en la gama, el 2.0 CRDi de 185 CV, modelo provisto de tracción total y cambio automático de 8 velocidades, y el 1.6 CRDi en su variante de 116 CV (con tracción delantera y cambio manual de 6 marchas) y de 136 caballos (con tracción delantera y cambio automático de doble embrague y 7 velocidades).