El Toyota Yaris se ha hecho mayor. ¿Quieres saber por qué?
El Yaris de 2020, la cuarta generación, tiene mucho de nuevo y también de bueno. Esto no quiere decir que el anterior no lo fuera, pero sí que ha sido superado en todo. Empezando por su estética, ahora más agresiva y deportiva, en la línea de otros modelos como el atractivo C-HR. Además del poderoso frontal, lo que más destaca del último Yaris es la parte trasera, ensanchada, con las ópticas sobredimensionadas y unidas entre sí, que en combinación con el alerón y el difusor inferior le dan mucho más empaque. Lateralmente tiene una “cintura” más alta y se pierde algo de superficie acristalada atrás, pero el diseño se beneficia mucho.
Parte de los recursos estilísticos se deben a la nueva plataforma, que por primera vez Toyota utiliza en segmento de los utilitarios. El Yaris es prácticamente igual de largo que su predecesor, sigue sin sobrepasar los 4 metros, pero si es 5 centímetros más ancho y cuenta con 5 cm más de distancia entre ejes.
Por dentro el cambio es todavía más grande, con un rediseño total de todos los elementos. En el centro del salpicadero resalta la pantalla multimedia de 8 pulgadas, que además de ser táctil está apoyada por botones en cada lado para facilitar su manejo. Debajo hay dos aireadores centrales aprovechando el hueco existente en la consola central hasta llegar a los mandos del sistema de climatización.
El cuadro de instrumentos es digital, y la información se representa mediante dos esferas, la izquierda para controlar el funcionamiento del sistema híbrido. En el centro hay una sección en forma cuadrada que proporciona bastante información general del coche. El volante multifunción es más pequeño que el del Yaris anterior y de diseño deportivo.
El habitáculo es amplio en relación al tamaño. La mayor distancia entre ejes aporta más espacio atrás, pero sigue sin ser el apartado en el que más luce. El maletero se mantiene en 286 litros de capacidad.
Descrito el ambiente, empezamos con las sensaciones. Lo común a todo es que por calidad y diseño parece que estamos en un modelo de un segmento superior. La postura de conducción es baja y retrasada, lo que ya de por sí da ciertos tintes deportivos y mejora el centro de gravedad.
El Yaris está disponible en España únicamente con el sistema híbrido clásico (no enchufable), el cual se compone de un motor gasolina de tres cilindros, 1,5 litros y 90 caballos, en combinación con otro eléctrico de 59 kW y una batería que es más compacta y liviana que el de la anterior versión híbrida. En total el conductor dispone de 116 caballos de potencia bajo el pie, y se maneja mediante un cambio automático de variador continuo, es decir, que no tiene escalonamiento de marchas.
En principio, a bajas velocidades –y hasta 130 km/h– manda el motor eléctrico, ideal para moverse por la ciudad mientras haya energía. Con el tamaño compacto del Yaris y su extraordinaria capacidad para maniobrar, da gusto moverse por las calles.
Al salir a la autovía, lo que era una sospecha se confirma: el coche parece de otra categoría y tamaño, muy confortable y asentado al asfalto, sensación que en carreteras más sinuosas se hace aún más patente por la equilibrada puesta a punto de la suspensión. También destaca el buen rendimiento del motor, con potencia de sobra para un coche de solo 4 metros y 1.085 kg de peso.
El sistema híbrido dispone de la posición “B” en el cambio para recuperar energía con las frenadas y deceleraciones, y es un buen recurso para mantener “vivo” el motor eléctrico más tiempo. Durante nuestra prueba, el Yaris tuvo un consumo de solo 5,5 litros a los 100 km, gasto que, si bien es exiguo, supera los 4,3 litros homologados por Toyota para esta versión.
El Toyota Yaris Electric Hybrid está a la venta a partir de 18.650 euros y cuenta con cuatro acabados, Active Tech, Style, Bussines Plus y Style Premier Edition. Esta última es la que hemos tenido oportunidad de probar y se distingue, además de por el color rojo y negro de la carrocería, por un abultado equipamiento. En eso también influye la sensación de coche de mayor categoría, claro.
Así, por los 21.350 euros que cuesta esta versión Style Premier Edition (o 195 euros al mes con la financiación de la marca) obtenemos mucho a cambio, cosas tales como llantas de 17 pulgadas, faros Full LED, pantalla multimedia táctil de 8 pulgadas, equipo de sonido JBL, Head-Up Display, cargador inalámbrico para smartphones, climatizador bizona, arranque sin llave y el paquete de seguridad Toyota Safety Sense, una apuesta firme por parte de la marca que incluye de serie en todos los Yaris sistemas como la cámara de visión trasera, sistema de precolisión con detector de peatones y ciclistas, reconocimiento de señales de tráfico y control de crucero adaptativo inteligente.
Motor: Híbrido de gasolina
Potencia (kW/CV): 85/116.
Cambio: Automático, sin marchas.
Largo (mm): 3.940.
Ancho (mm): 1.745.
Alto (mm): 1.500.
Maletero (litros): 286.
Velocidad máxima (km/h): 175.
De 0 a 100 km/h (seg.): 9,7.
Consumo medio (l/100 km): 4.3.
Emisiones CO2 (gr/km): 97.
Precio (euros): desde 18.650 euros.