Entre el valor venal y el de mercado se encuentran las pólizas que cubren a los vehículos clásicos
No es desconocido que los coches clásicos o históricos tienen necesidades especiales y que para obtener esta categoría deben pasar una serie de pruebas y cumplir varios requisitos. Pero una vez que se consigue esta etiqueta, se pueden obtener una serie de beneficios como por ejemplo son las pólizas de los seguros especiales para ellos.
Pero no todo son ventajas, ya que a veces este tipo de contratos tienen truco. Pueden tener un coste mucho más asequible pero, a la hora de la verdad, cubrir menos supuestos o ser menos resolutivos, por lo que al final una avería en carretera (por ejemplo) puede acabar saliendo muy cara.
La mayoría de las aseguradoras no cubren vehículos demasiado viejos pero, normalmente, tienen productos específicos para el caso de los clásicos o históricos. La diferencia con una póliza normal es que los kilómetros que el automóvil puede recorrer al año están limitados por la propia aseguradora. Este límite se establece porque lo que se asegura no es el vehículo, sino el riesgo a sufrir un accidente.
•Son pólizas muy económicas, ya que desde apenas 50 euros es posible asegurar un coche clásico.
•Tienen productos específicos para este tipo de vehículos, aunque en algunos casos son la única alternativa que ofrecen las aseguradoras.
•Suelen limitar el número de kilómetros anuales entre 5.000 y 10.000 km.
•El valor venal asegurado es muy bajo y las coberturas suelen ser las mínimas obligatorias. Puede ser que no nos cubran la rotura de una luna si su sustitución cuesta más que el valor venal.
•Conviene leer las condiciones de la asistencia en carretera o el seguro de robo, lunas e incendio para comprobar el valor que cubren antes de encontrarnos con una sorpresa.