Las distracciones siguen siendo la primera causa de accidente de tráfico
El análisis de las estadísticas de los accidentes de tráfico no desvela datos nuevos pero sí una realidad desalentadora: los conductores españoles siguen sin prestar la debida atención a la carretera cuando van al volante. Y es que por cuarto año consecutivo las distracciones al volante siguen siendo la mayor causa de los accidentes de tráfico.
En concreto, durante el pasado 2019 el 28% de los siniestros con víctimas mortales estuvieron provocados por esta razón y el recuento de los fallecidos alcanzó los 359. Igualmente, durante los trayectos de este verano, pocos en comparación con la normalidad de otros años, el tipo de accidente más registrado ha sido la salida de la vía, que habitualmente está provocada por despistes y distracciones además de por excesos de velocidad.
Además de las salidas, los choques con el vehículo precedente o los atropellos son los otros tipos de accidentes más frecuentes debido a distracciones. Y, entre estas, la DGT señala que la más habitual es el uso del teléfono móvil al volante.
El uso de los smartphones al volante es la distracción más habitual entre los conductores y no solamente se usa para llamar o ver un mensaje: hay registros de denuncias por utilizar incluso las redes sociales mientras se conduce. Esta infracción está sancionada con 200 euros de multa y la pérdida de tres puntos en el carné.
Pero también son un despiste recurrente, ya que además obligan a apartar la vista de la carretera, la radio y los GPS. Manipularlos durante el trayecto supone un riesgo que aumenta su peligrosidad con la velocidad, por lo que es muy desaconsejable usarlos si se transita por autopista o carretera.
Fumar al volante es otra distracción que puede no parecer tan grave como es. Solo con el gesto de encender un cigarrillo se retira la vista de la carretera durante al menos 3 segundos. En este tiempo y dependiendo de la velocidad, se puede recorrer hasta un centenar de metros a ojos cerrados.