No renueves porque sí: cómo dar de baja tu póliza de seguro
Para circular con tu coche, es obligatorio tener un seguro contratado bajo amenaza de sanción. Pero lo que no es obligatorio es mantener durante toda la vida un contrato con la misma aseguradora. Si quieres cambiar de seguro, aquí te explicamos cómo.
Para darte de baja de tu seguro tienes que comunicárselo a tu aseguradora al menos con un mes antes de antelación de la fecha en la que vence vuestro contrato. Salvo en ocasiones muy concretas, no podrás darte de baja antes de que el acuerdo finalice.
¿Cómo comunicarlo? Pues muy sencillo: envía un documento en el que recojas los datos del vehículo, tus datos, el número de la póliza y la fecha de la notificación. Además, debes expresar con claridad tu deseo de dar de baja. Esta notificación tienes que enviarla a través de algún medio que deje constancia como un fax, un burofax o una carta con acuse de recibo. De todas formas, algunas compañías ya permiten comunicarlo por internet o por teléfono.
El gran error que no debes cometer es dar por sentado que dejando de pagar los recibos de tu aseguradora ya estás rescindiendo el contrato. En este caso, la compañía de seguros iniciará acciones legales y puedes acabar en la lista de morosos por no pagar. Esta situación te impedirá contratar una nueva póliza, por ejemplo.
Algunas de las situaciones concretas por las que podrías darte de baja antes de lo previsto son: modificación de las coberturas o del precio o que cambien las condiciones de riesgo y el precio no se abarate. Para cualquier modificación, la aseguradora debe notificártelo con dos meses de antelación en los que tú podrás rescindir tu contrato. Si no respondes, se dará por sentado que el contrato se renueva automáticamente.