Que la borrasca Álex no te pille desprevenido: consejos para conducir con viento fuerte y lluvia
El otoño ya está aquí y se ha dejado notar con una bajada de las temperaturas y un clima que, entre el viento y la amenaza de lluvias, más invita a quedarse en casa que a salir a la calle. Si, pese a ello, este fin de semana hay conductores que tienen planeado algún viaje en carretera (sea por ocio o por obligación) lo mejor es que pongan precauciones al volante ante las nefastas predicciones.
Se esperan grandes rachas de viento y lluvias repartidas en general por todo el territorio, aunque si bien con más incidencia en la mitad norte. Para conducir de manera segura bajo estas condiciones atmosféricas hay que asegurar, lo primero, que la visibilidad al volante es la ideal para conducir sin sustos. Hay que comprobar que se mantiene tanto la capacidad de ver como la de ser vistos, por lo que se recomienda revisar las luces del vehículo antes de salir a carretera. Por lo demás, estos son los siguientes consejos que ofrecen las autoridades de tráfico.
Puede ser el fenómeno meteorológico que menos intimide en carretera, pero durante un trayecto a grandes velocidades puede afectar bastante a la seguridad en conducción. El primer consejo, pues, a seguir es no subestimar los riesgos de las rachas de viento.
También es importante colocar todo el equipaje en el maletero y evitar llevar bultos en el techo del coche, para que el vehículo sea así más aerodinámico. Igualmente, es aconsejable desenganchar el remolque en caso de llevar uno.
En lo que se refiere a la conducción, hay que adecuar la velocidad a las rachas de viento (es conveniente fijarse para ello en la vegetación y las mangas de viento), circular por el centro del carril y sujetar el volante con firmeza. Se desaconseja frenar bruscamente.
En caso de que las rachas de viento vayan acompañadas de lluvia, lo primero es evitar que los cristales del coche se empañen para mantener la visibilidad intacta. También hay que hacer un uso adecuado de las luces y de los limpiaparabrisas.
En lo que se refiere a la conducción, se recomienda aumentar la distancia de seguridad por la pérdida de adherencia a la carretera. Así mismo, la conducción debe ser suave y hay que evitar los acelerones para que las ruedas no patinen.