¿Sabías que el estrés provocado por el coronavirus podría afectar a tu conducción?
El estrés es una reacción fisiológica del cuerpo que, en cierta medida, va bien para generar reacciones que nos permitan salir de situaciones de cambio ante las que no tenemos una respuesta rápida. Pero, dentro de ese proceso, hay ciertos estadios que pueden alterar las facultades físicas y emocionales e incidir en nuestras actividades cotidianas.
La conducción es una de ellas. El estrés, en su fase de resistencia e incluso en la de agotamiento si la situación de intranquilidad se alarga demasiado en el tiempo, puede provocar cansancio por falta de sueño, hostilidad y agresividad e incluso alteraciones del estado de ánimo.
Todos estos síntomas de estrés y ansiedad afectan a la conducción, que es una actividad que requiere el cien por cien de las facultades físicas y emocionales para desempeñarse de manera segura y no poner en riesgo a nadie.
Según la Fundación para la Seguridad Vial, Fesvial, ante la situación del Covid-19 los ciudadanos nos encontramos en situación de resistencia y tenemos diferentes herramientas para afrontar este nivel de estrés que provocan las crisis sanitaria y económica derivadas del coronavirus.
Así, si durante estos días es necesario utilizar el vehículo particular o dentro de los trabajos considerados esenciales toque conducir, es mejor seguir estos consejos para no dejarnos llevar por el estrés e intentar mantener al máximo la seguridad al volante:
-Procura dormir las horas necesarias.
-Intenta no dedicar mucho tiempo a pensamientos catastrofistas.
-Evita el consumo de alcohol y no te automediques.
-No te pongas metas inalcanzables y prioriza lo importante.
-Si encuentras un hueco, haz algo que te entretenga y relaje.
-Si estas conduciendo escucha música que te guste, no estés continuamente pendiente de la información sobre la pandemia.
-Intenta mantener una dieta saludable y beber mucha agua.
-Reduce el consumo de café y otros estimulantes.
-Si estas conduciendo y tienes un ataque de ansiedad o pánico (falta de aire, palpitaciones, sensación de ahogo y desbordamiento), lo más recomendable es que detengas tu vehículo y solicites ayuda.